Entre 1968 y 1974, los científicos Frank Sherwood Rowland y Mario Molina estudiaron la capa de ozono que recubre al planeta Tierra protegiéndolo de los rayos perjudiciales que emite el Sol. Fue en la primera mitad de los años 70 del siglo XX, cuando soltaron como una bomba atómica informativa al público que esta se estaba resquebrajando y tenía un agujero.
La terrible noticia les valió un premio Nobel de Química en 1974, pero fue el inicio de una era en que muchos científicos y gente del...
Aplicación de la tecnología en la gestión ambiental: un futuro sostenible
